¿DÓNDE VAS CAPERUCITA?

Me dices "cestita de paja" y me viene a la cabeza Caperucita.  La locuela e inconsciente jovenzuela que andaba trotando por aquellos bosques de Dios, buscándose un disgusto con el lobo por ir a llevarle cuatro cosas a su abuela. ¡Anda que no se hubiese evitado sustos si hubiese hecho la compra en el Carrefour online!.

"No, Carol, vas mal...tú puedes hacerlo mejor...piensa, piensa en una cestita de paja ... ¿qué ves?"

¡Ya está! ¡Veo al Oso Yogui!

Anda que no me gustaba de pequeña ver como aquel osito iba chorizando "canastas" y se iba poniendo morado a comer compulsivamente como si estuviese recién salido de un after.

"Que no, que no...piensa en cestas...cestas de paja..nada de osos ni niñas ñoñas tontorronas..."

"Déjalo mona que de lo que se trata hoy es de hablar de la tendencia de ir por la calle con cestitas de paja cuan Caperucita urbana feroz".

 

Confieso que esta tendencia me encanta.

Aunque ya es más vieja (con perdón) que Jane Birkin (alias Juana Bolsaco)

Incluso la llevan cuando van "arreglás" con las transparencias (esto no lo acabo de ver).

Pero incluso eso, ya lo llevó ella (un poco pasado de rosca el modelete pero es que la Juana Bolsaco era "asín" de lanzada... "hija sin madre" que diría mi abuela)

Ojito que ella inventó lo de la cesta de paja y lo de posar en medio de las vías del tren, así en plan rollo entre suicida y descerebrada, sólo que nuestra Juana era más lista y no se ponía en medio.

La tendencia cómoda no es.  Llevar la cesta es engorroso y para meterte en el metro en hora punta... no es tanto por volumen como por posibilidades de salir teniendo que pedir dinero para el bus.

No quiero dar pistas...pero todavía no he visto la pose "leo mientras apoyo la cesta".

En el pueblo lo de ir con la cesta es para pensar que te vas a la siega con el bocata y la bota de vino.

 

Monas, van todas monísimas, e incluso yo me he animado a sacudir la arena de mi cesta de playa y reciclarla en bolsaco de paseo (ante la mirada atónita de mi santa y sabia madre que me ha dicho: "nena, ¿y no has encontrado otra cosa más grande?".

Mamá, que también las hay pequeñas y coquetonas.

Esta moda está tan extendida ya que hasta Barbie se ha subido al carro.

Aunque para modernos nuestros amigos de Newark (Ohio) que tanto aman el cestismo pajilleroso que hasta un edificio se han hecho.

¿CÓMO SE OS HA QUEDADO EL CUERPO?