Tengo una amiga que en un viaje a Nueva York se vino arriba, entró en Chanel y se compró un bolso.
La mujer venía entre eufórica y avergonzada por haberse gastado el finiquito sueldo de mucha gente en aquello.
Cuando me lo fue a enseñar me avisó: "saca el microscopio porque el presupuesto no daba para más". Así que lo que me enseñó fue un Chanel de guata negro, monísimo, en el que te entraban el móvil, la barra de labios, las llaves de casa (sin llavero) y tres kleenex sueltos.
Se lo devolví sobado y pegajoso por las babas que solté espontáneamente, y con la sensación de que había vivido una experiencia religiosa modilmente hablando.
Si os dais una vuelta por los blogs o por Instagram veréis, no sé si tan asombradas como yo, que los Chaneles crecen en los árboles (de Aliexpress) porque las hay que los tienen por docenas en todos los colores, tamaños y texturas posibles.
Otra cosa que he visto es que EL TAMAÑO SÍ IMPORTA.
Si mi amiga se dejó el sueldo en un bolso microscópico, las egoblogueras o son todas unas ricas herederas o se han gastado la herencia de su tía-abuela Enriqueta en un bolso, porque ¡¡¡pedazo Chaneles me gastan!!! . Eso, a ojo, costaría como 20 camellos, un piso en La Castellana (a poder ser entre el comienzo de la calle y el Bernabeu, ya puestos a pedir), o el avión de John Travolta.
Si el rollo "cadenita" ya es molesto de por sí, con lo que debe de pesar un bolsaco de estos te debe de dejar con luxación de hombro y heridas sangrantes, así que abstenerse hemofílicas.
Con ese tamaño fijo que si viajas pagas un asiento extra (obviamente de "exceso de equipaje" no hablamos porque un Chanel NO SE FACTURA, antes te amputas un brazo).
¿Llevais ya la cuenta de cuánto puede costar esta bonita galería fotográficasuponiendo que todos fuesen verdaderos?.
¿Crisis?, ¿quién dijo crisis?. ¡Seguimos con el despiporre!
En fin, como dice el refrán:
CHANEL GRANDE, ANDE O NO ANDE
Cuando me lo fue a enseñar me avisó: "saca el microscopio porque el presupuesto no daba para más". Así que lo que me enseñó fue un Chanel de guata negro, monísimo, en el que te entraban el móvil, la barra de labios, las llaves de casa (sin llavero) y tres kleenex sueltos.
Se lo devolví sobado y pegajoso por las babas que solté espontáneamente, y con la sensación de que había vivido una experiencia religiosa modilmente hablando.
Si os dais una vuelta por los blogs o por Instagram veréis, no sé si tan asombradas como yo, que los Chaneles crecen en los árboles (de Aliexpress) porque las hay que los tienen por docenas en todos los colores, tamaños y texturas posibles.
Otra cosa que he visto es que EL TAMAÑO SÍ IMPORTA.
Si mi amiga se dejó el sueldo en un bolso microscópico, las egoblogueras o son todas unas ricas herederas o se han gastado la herencia de su tía-abuela Enriqueta en un bolso, porque ¡¡¡pedazo Chaneles me gastan!!! . Eso, a ojo, costaría como 20 camellos, un piso en La Castellana (a poder ser entre el comienzo de la calle y el Bernabeu, ya puestos a pedir), o el avión de John Travolta.
Si el rollo "cadenita" ya es molesto de por sí, con lo que debe de pesar un bolsaco de estos te debe de dejar con luxación de hombro y heridas sangrantes, así que abstenerse hemofílicas.
Con ese tamaño fijo que si viajas pagas un asiento extra (obviamente de "exceso de equipaje" no hablamos porque un Chanel NO SE FACTURA, antes te amputas un brazo).
¿Llevais ya la cuenta de cuánto puede costar esta bonita galería fotográfica
¿Crisis?, ¿quién dijo crisis?. ¡Seguimos con el despiporre!
En fin, como dice el refrán:
CHANEL GRANDE, ANDE O NO ANDE
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