viernes, 12 de junio de 2015

BATALLITAS DE LA ABUELA CEBOLLETA: EL MÓVIL

Allá por el Pleistoceno, cuando una era una mozalbeta en edad de merecer, NO EXISTÍAN LOS MÓVILES.

Las #señorasquellevamosañoscumpliendo35años sabrán bien de que hablo

Quedábamos llamando a casa de las amigas y nos poníamos de acuerdo: a las 10 y media delante de la iglesia.

Ana Mari siempre iba rezagada y nos hacía esperar, y claro, las 10 y media de la noche, en el mes de noviembre en Invernalia, y Ana Mari haciéndonos esperar hasta que nos quedásemos tiesas de frío y mojadas de la lluvia con lo que nos había costado ponernos monas...pues no.

Así que allá iba alguna de nosotras a una cabina, sí ¿os acordáis de las cabinas de teléfono?, las que se cerraba la puerta y siempre pillabas el paraguas y donde había que meter monedas (no existían las tarjetas) y nunca te daban el vuelto.


Total, que íbamos a la cabina a llamar a casa de Ana Mari (nos sabíamos los números de memoria, no como ahora, que los grabas en el móvil y no tienes ni idea) a ver por donde andaba metida porque sino nos íbamos y la esperábamos en algún bar (esa es otra, ninguna quería llegar sola a los bares, así que lo de "nos vamos y te esperamos en el bar" era una amenaza nada velada).

Bueno, pues recordando  la época de María Castaña, pensé que menos mal que de aquella no existían los móviles en momentos de alegría etílica.

Anda que no íbamos a tener el dedo suelto para llamara o mandarle un mensaje a Borja Mari, que nos había cambiado por Piluca, y decirle cuatro frescas a las 3 de la mañana con el chumba chumba del garito de turno de fondo.

Porque las mujeres con dos chupitos y una pandilla de amigas, nos venimos arriba (por lo menos las de mi pandilla).


El mensaje sería algo así como: "Bodja Madi, sin acritud, te deseo lo mejor del mundo, y espero que no cojaz un herpes estando con Piluca, de vezdaz, que no quiero que pilles una venérea".


Porque el alcohol es como "El Gran Hermano": magnifica los sentimientos.  Y Borja Mari, del que ya ni te acuerdas, de repente pasa a ser esa espinita que ha quedado clavada en tu mísera vida sentimental.  Dos copas más y llega a ser el amor de tu vida.


Ahora os situo hipoteticamente hablando:

Ataulfo "el Guapo", hombre con un físico de 10 y un cerebro de -10.  Pasas olímpicamente ya de Ataulfo, es más, te preguntas si realmente te gustó alguna vez o lo soñaste como Resines en el final de Los Serrano.



Llega Ataulfo con Rogelia, su nueva novia.

Inciso: Ataulfo de repente te ve como una tía guay y piensa que sois megachipiamigos. Peggggggggggg, error Ataulfo, moi no querer ser pandi contigo. No no no no no y no....y mil veces no.

Requeteinciso: Un día de sidras cócteles a la luz de la luna, Ataulfo te pilla por banda y te cuenta su historia con Rogelia para que le des tu opinión. A ver, criatura, ¡qué le estás pidiendo sangre a Drácula! ¿dónde vas Alfonso XII, dónde vas triste de ti?. Después de oírle una historia para no dormir me pide sinceridad, y oye, una sincera es, así que le dices: "en 2 palabras: ZO-RRA"

Ataulfo te da la razón (eso es amor a Rogelia) y te dice: "un día te la presento".

¿Quéeeeeeeee? ¡pero que invento moderno es este! ¡que no tengo la mínima intención de hablar con Rogelia! ¡ni se que ocurra Ataulfo o te mando a tomar...Fanta!

Pero ¡ay! Ataulfo "el Guapo" tiene el cerebro de un mosquito y la delicadeza de una lima de pulir callosidades y una noche de baretos te tiende una emboscada y ¡zas! te presenta a Rogelia.

De repente sientes que te han metido el palo de una escoba por el orificio inferior trasero, algo te impide moverte y le saludas como si fueses la Reina de Inglaterra, o sea, te va a dar dos besos y tu le extiendes la mano dejándola descolocada. ¡Anda que te voy a dar a ti dos besos para que me pegues algo no precisamente bueno!


Haces un Pantoja "dientes dientes" 

 

 Y cuando Ataulfo y Rogelia se van empiezas a rajar con las amigas.


Claro, SIEMPRE, tenemos una amiga que se viene más arriba que tú y te calienta la cabeza, hasta que cuan pistolero del Oeste, sacas el móvil y atacas con todas tus amigas de testigo:


"Ataulfo, como me vuelvas a poner en evidencia haciéndome hablar en público con la zorra de tu novia, te vas a acordar, que una pierde "caché" si me ven relacionándome con semejande puuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuu piiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii pooooooooooooooooooooo paaaaaaaaaaaaaaaaaa".

Contestación de Ataulfo: "Hija de mujer de moral distraída"


MORALEJA: Menos mal que en mi época juvenil no había móviles.

MORALEJA 2: Si vas a salir de copas con amigas deja el móvil en casa no vaya a ser que te pongas tontorrona.

NOTAS DE LA "CUTRE ESCRITORA": 

Todo parecido con algún hecho acontecido en el pueblo hace algunos años es debido de la casualidad.

No conozco a nadie que se llame Ataulfo.

No conozco a nadie que se llame Rogelia.

Los hipotéticos Ataulfo y Rogelia ya no están juntos.

Ataulfo sigue queriendo ir de guay.

La protagonista de esta batallita borró el número de Ataulfo del móvil que las "agendas las carga el Diablo".

No conozco a Ataulfo...fue una amiga mía.    

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